Un tema que también está teniendo mucho tirón últimamente es el de los tratamientos de keratina. Y no me extraña porque la verdad es que ha sido una revolución en cuanto a protección capilar. Lo que pasa que como con todo, hay muchos mitos y muchas diferentes leyendas y no todas son verdad.
Lo que quiero hoy es dejar claro cuales son las funciones de
la keratina, su mejor uso y desmentir todas esas “verdades” que oímos por ahí.
Fundamentalmente y lo primero que hay que saber es que la
keratina es la proteína principal de
la que están compuestos cabello y uñas. La keratina como tal NO tiene la
propiedad de alisar nuestro cabello, como mucho puede reducir un poquito el
encrespado pero nunca alisar.
Se ha abusado mucho de este producto ofreciéndonos cosas que
son imposibles e incluso ilegales, sí, ilegales digo. Explico por qué:
Los tratamientos de keratina no nacen ahora, esto viene ya
haciéndose en Latinoamérica bastantes años atrás. Todo comenzó cuando alguien
descubrió que mezclando dos ingredientes como son la keratina y el formaldehído
se conseguía que los cabellos tuvieran un aspecto sano y guardase durante más tiempo
la forma que se le daba al peinarlo. La fórmula encontrada daba un muy buen
resultado pero como siempre, error bastante común en nuestra especie, nunca nos
conformamos con lo que tenemos y le buscamos una vuelta de tuerca más a todo. ¿Qué
pasó? Se intentó buscar la fórmula para que esos efectos resultaran más
pronunciados, esto traducido en jerga peluquera sería algo como: cabellos extra
lisos, brillantes, fuertes, protegidos, fáciles de controlar, sin encrespado, y
un largo etc. Todo lo que un cliente quisiera oir, esto es lo que se le
prometía. Y claro, todo esto sin dañar absolutamente el cabello.
¿Cómo es posible todo esto? Ahí está la cuestión, no todo lo
que nos cuentan es cierto y debemos saber por qué y sobre todo, si alguna vez
nos queremos hacer un tratamiento de este tipo, debemos estar bien informados
de que es lo que nos van a aplicar.
La deformación de este mito viene cuando todavía en América
comprobaron que si añadían más cantidad de formaldehído a la keratina
conseguían que los resultados de los tratamientos durasen más. Como resultado
de tal fórmula se conseguían realmente cabellos con un liso mucho más duradero
“pero”… el tratamiento ya no era ni tan natural, ni tan saludable. Le estaban
añadiendo un químico al cabello que evidentemente dañaba la fibra capilar
considerablemente.
Otra nota en contra de estos tratamientos era su alto
precio, evidentemente extraer una keratina natural es muy costoso y por lo
tanto EL valor de estos tratamientos era muy alto. Así que, el siguiente paso era
bajar costes en la fabricación de estos productos, ¿y como?
Keratinas sintéticas:
Absolutamente nada que ver con la natural. Realmente no conozco muy bien el por
qué pero estas keratinas, cuando haces varias repeticiones de los tratamientos,
se cristalizan, se queda como rígida, estalla la fibra capilar y ¿qué ocurre?
Que el cabello se rompe. Digamos que pierde la flexibilidad natural y CLACK!!
Actualmente en Europa no está permitido superar un nivel de
0,2% de formol en los productos que se comercializan para estos tratamientos,
así que es algo que con toda tranquilidad podéis preguntar si vais a haceros
uno. En América estos niveles son bastante más altos y son legales pero hay que
tener en cuenta que el cabello de los latinos y el de los europeos es bastante
diferente.
Por lo tanto, un buen tratamiento de keratina, de keratina humana pura ( extraída del
mercado de cabello humano, del que no sirve para hacer extensiones o pelucas),
tendrá un coste alto.
También hay salones donde nos ofrecen estos tratamientos por
un precio mucho más bajo, que muchos se
quedan sorprendidos por la gran diferencia que hay de unos a otros sin
entender por qué y es lógico. La diferencia está en que estos últimos años han
salido al mercado productos nuevos que contienen un pequeño porcentaje de keratina líquida en los champús o en
las mascarillas que ayudan a dar un mejor aspecto a nuestras melenas, pero
estamos hablando de efectos superficiales que desaparecerán con el siguiente lavado.
Tampoco debemos hacer mucho caso cuando nos dicen que los
tratamientos de keratina pura tienen una duración de… X meses, esto no es del
todo cierto, ya que depende totalmente de la frecuencia con que te laves el
cabello. Cuantas más veces lo laves, menos duración tendrá y otro dato a tener
en cuenta: es muy importante lavarlo siempre con un champú y una mascarilla sin
sulfatos (sales de los compuestos
orgánicos que se utilizan para crear estos productos), muy muy importante esto.
Podemos llevarnos por delante todo el tratamiento en dos lavadas si no lo
hacemos así y lo lavamos con un champú corriente ( la mayoría contienen
sulfatos).
Resumiendo:
Los tratamientos de keratina humana pura son:
-
Reconstructores capilares.
-
Aportan muchísimo brillo y fuerza al cabello.
-
Rejuvenecen la melena.
-
Aportan algo de volumen.
-
Reducen el encrespado.
-
Facilitan y dan durabilidad al los peinados.
Y nunca: Alisan si son de verdad keratina pura humana. A no
ser que lleven formol o derivados en niveles superiores a los permitidos
europeos.
Ideal para:
-
Cabellos rebeldes incontrolables.
-
Cabellos muy finos, sin cuerpo, ni fuerza.
-
Cabellos encrespados.
-
Cabellos muy castigados por agentes químicos o
naturales.
-
Cabellos quebradizos.
-
Cabellos muy porosos.
Espero que con todo esto sepáis muy bien lo que os hacéis y
que no os engañen. Preguntadlo todo, el profesional debería saberlo. Y sobre
todo comprobad que los precios son justos aunque os advierto que últimamente
han bajado mucho, podemos encontrarlos por menos de 60€ incluso, los de
keratina pura ya que han mejorado las tecnologías y la aplicación es mucho más
rápida y menos costosa que antes.
Disfrutad de vuestras melenas!!!!!